Fijadores de roscas Loctite®: diferencias de codificación por colores

Los fijadores de roscas son productos esenciales en cualquier tipo de obra o reforma para garantizar un resultado óptimo y una larga duración de la instalación cuando hay elementos de anclaje. En este post, nuestro equipo resuelve algunas dudas sobre este producto, sus usos industriales y en construcción y qué ventajas presenta.

Para qué sirven los fijadores de roscas

Este tipo de fijadores se utilizan para agarrar elementos como tornillos, pernos o espárragos y evitar que estos se aflojen o acaben moviéndose debido a impactos o vibración. Son, por tanto, necesarios en aquellos elementos en los que, por su propio uso, existe vibración: maquinaria industrial, herramientas de impacto…

Son especialmente útiles cuando otros elementos como las arandelas o los cierres mecánicos no son suficiente. A pesar de que los fijadores de roscas son productos con alta resistencia, su composición permite que, en algunos casos, el desmontaje sea también sencillo.  

Loctite®: marca líder en los fijadores de roscas

Dentro de los productos de fijación de roscas, destaca el fabricante Loctite®. El sistema de Loctite® se basa en un sistema de inhibición de cura para una resina única de fijación que se endurece en ausencia de aire, conocido como sellante anaeróbico.

Por cierto, ¿sabes que el nombre de Loctite hace referencia a un juego de palabras? Lock-tight, lo que significa “cierre firme”.

El fijador de roscas Loctite® son esenciales para los proyectos de fijación de roscas, ya que evitan el autoaflojamiento y aseguran cualquier tornillería roscada contra vibraciones e impactos.

Se trata de productos en presentación líquida que rellenan la holgura entre los filetes de las roscas. Utilizados para el ensamblaje de elementos roscados, los fijadores de roscas Loctite® aseguran el montaje de forma permanente, eliminando además la corrosión por frotamiento, creando una unión solidaria entre las partes.

Qué factores debo tener en cuenta a la hora de elegir el fijador de roscas

Los fijadores de roscas se dividen según su grado de dureza y, en función de ello, también del tipo de aplicación y finalidad. Aunque hablaremos más delante de los distintos productos y de sus características propias, se puede hacer una división sencilla entre: baja resistencia, media resistencia y alta resistencia.

De forma resumida, los productos de baja resistencia son óptimos para aquellas construcciones e instalaciones que necesitan ser desmontadas de forma frecuente. La resistencia media está pensada para la gran mayoría de las aplicaciones, salvo para aquellas que necesitan ser desmontadas de forma frecuente. Por último, la alta resistencia está indicada para uniones permanentes y, para el desmontaje, se necesitan herramientas específicas.

 Además, es necesario tener en cuenta el tamaño de la rosca. En este aspecto, Los fijadores de baja resistencia son ideales para roscas pequeñas, mientras que los de resistencia media o alta son más adecuados para roscas más grandes, ya que deberán ejercer un mayor poder fijador.

El material que se utilice debe ser compatible con el fijador. Existen algunos fijadores formulados específicamente para ciertos metales o plásticos. A la hora de plantear el proyecto, será necesario evaluar la compatibilidad de estos materiales.

Diferencias entre los fijadores de roscas Loctite® según su codificación por colores

Como hemos visto, existen diferencias según el tipo de aplicación, materiales a utilizar y necesidades de desmontaje posterior. En el caso de los productos Loctite, podemos encontrar una codificación sencilla por colores que ofrece distintos tipos de resistencia, aplicaciones y materiales óptimos con los que trabajar.

Los fijadores de roscas Loctite® están disponibles en diferentes viscosidades y resistencias, y pueden usarse para una amplia gama de aplicaciones. 

Fijador azul (Loctite® 243)

Este fijador es desmontable con herramientas manuales. Es idóneo para maquinaria y prensas, bombas y compresores, pernos de montaje, cajas de engranajes. En cuanto a los tamaños de rosca admitidos, es recomendable su uso hasta tamaños de rosca de métrica 36.

Tiene una resistencia media y su intervalo térmico operativo es muy amplio, ya que aguanta en perfectas condiciones en el tramo de -55 a +180 °C. El tiempo de fijación es rápido, y va desde los 10 minutos en acero o acero inoxidable hasta los 5 minutos en el caso del latón.

Fijador verde (Loctite® 290)

Este fijador tiene una de sus principales aplicaciones en el sector industrial y en construcción debido a su dureza. Es muy difícil de desmontar con herramientas manuales estándar y, para conseguirlo, puede requerir calor localizado. Su uso recomendado es en fijaciones preensambladas como tornillos de instrumentos, conectores eléctricos, tornillos prisioneros o carburadores.

Su resistencia funcional comienza una vez han pasado 3 horas desde la aplicación. El tamaño de rosca no debería ser superior a métrica 6.

Fijador rojo (Loctite® 277)

Se trata de un fijador de resistencia y viscosidad altas, indicado para el uso en maquinaria pesada o equipos industriales y adecuado para la fijación y el sellado de tornillería grande, de hasta métrica 80.

Cuenta con un tiempo de fijación de 30 minutos en acero, 25 minutos en latón y 270 minutos en acero inoxidable y es ideal para aplicaciones donde hay que evitar la migración de adhesivo. Además, puede tolerar ligeras contaminaciones de aceites industriales y un rango de temperaturas de -55 a +150 °C.

Fijador púrpura (Loctite® 222)

Este fijador es ideal para pequeña tornillería, y cuenta con baja resistencia y un desmontaje fácil, que es posible realizarlo con herramientas manuales. 

Este componente permite fijar tornillos de ajuste, tornillos de cabeza avellanada y tornillos prisioneros y es adecuado para metales de baja resistencia, como aluminio o latón. Sin embargo, se puede aplicar en todos los metales, incluidos sustratos pasivos como, por ejemplo, acero inoxidable, aluminio, superficies galvanizadas, etc. Este fijador previene el autoaflojamiento de piezas sometidas a vibración, como puede darse en bombas, cajas de cambio o prensas.

Tolera contaminaciones ligeras de aceites industriales, por ejemplo, aceites de motores, aceites anticorrosión y fluidos de corte.

Beneficios de usar fijadores de roscas Loctite®

Una vez hemos conocido algunos de los productos destacados, podemos pasar a destacar algunos de los beneficios más importantes en el uso de fijadores de roscas Loctite.

Prevención de aflojamientos no deseados

El principal beneficio que ofrecen los fijadores de roscas Loctite® es la prevención de aflojamientos no deseados en lugares donde existe vibración o alto impacto, tanto en construcciones como en maquinaria.

Protección contra la corrosión

Buena parte de los materiales fijadores están compuestos por metales, algunos de ellos no inoxidables, por lo que, con el paso del tiempo y la entrada de humedad, podrían terminar corrompiéndose, oxidando y, finalmente, rompiendo o partiendo. Esto pondría en peligro la fijación y supondría un peligro. Los fijadores protegen con su capa el material fijador y posibilitan que esta corrosión no se dé o que ésta sea mucho más tarde.

Incremento de la seguridad y durabilidad de las uniones roscadas

En relación con el punto anterior, el uso de fijadores de roscas ofrece una mayor seguridad y durabilidad en las uniones roscadas, puesto que son garantía de resistencia ante posibles impactos o vibraciones. Como hemos visto, algunos de estos materiales están pensados para resistir cargas importantes y condiciones de temperatura casi extremas. Son, por tanto, el complemento ideal para que las uniones roscadas sean duraderas.

Errores comunes en la aplicación de fijadores de roscas

Para conseguir un resultado óptimo, duradero y seguro, es necesario tener presentes algunos de los errores más comunes a la hora de aplicar fijadores de roscas:

Tiempo de curado/secado: es importante comprobar cuál es el tiempo de curación del producto antes de que pueda ser utilizado. Además, debes tener en cuenta que el tiempo de curado puede ser distinto en función del material con el que esté realizado (latón, acero, acero inoxidable…)

Utilizar un producto con menor resistencia a la necesitada: los fijadores de roscas Loctite presentan distintos niveles de resistencia según su composición. Por ello, es necesario tener presente qué uso se dará a la fijación y qué tipo de resistencia presenta cada fijador.

Aplicar insuficiente cantidad de producto: a la hora de aplicarse los fijadores, debes tener en cuenta la cantidad de producto a utilizar.

Superficies sucias: aunque algunos de estos fijadores tienen resistencia ante la suciedad, sobre todo en el caso de grasas, es importante que antes de aplicar el fijador, la superficie se encuentre libre de aceites, grasas y otras partículas que puedan dificultar el proceso de secado y de posterior adherencia.

Consejos para el mantenimiento de las uniones tratadas con fijadores de roscas

Como toda instalación, las fijaciones de roscas requieren un buen mantenimiento para que estas sean duraderas y seguras. Aquí tienes las más importantes:

Sigue siempre las indicaciones del fabricante: en cada envase, encontrarás recomendaciones útiles para aplicar y mantener de forma satisfactoria la fijación.

Inspecciona de forma regular las fijaciones: si detectas que hay incidencias, aflojamientos o cualquier tipo de problema, vuelve a realizar la fijación.

Evita sobrecargas: cada tipo de fijación soporta una carta distinta. No sobrecargues la instalación para garantizar su seguridad y durabilidad.

Mantén la fijación limpia: sobre todo, de aceites y grasas, que pueden dificultar el buen funcionamiento de algunos fijadores.

Si estás en medio de un proyecto que requiere fijación de roscas y no sabes por dónde empezar, en CIR62 encontrarás una gran variedad de productos de las mejores marcas. Además, cuentas con todo nuestro equipo especializado, que atenderá y resolverá tus dudas para que el resultado final sea óptimo y duradero.